Columna ALTERNATIVA: Enajenación e Ignorancia

Enajenación e ignorancia

Por Gustavo Mares

El momento por el que atraviesa la fiesta brava en el mundo es crucial. Ahora, más que nunca, el noble arte de lidiar reses bravas se ha visto envuelto en feroces ataques auspiciados por mentes enfermas que no alcanzan a ver más allá ‘de sus narices’. Mentes obtusas que toman ‘como artículo de fe’ las películas de Walt Disney, en las que leones y tigres comen vegetales, pero ni un gramo de carne. No señores. Ese no es el mundo real.

En el mundo en el que vivimos existe algo que se llama ‘cadena alimenticia’, de tal suerte que el león se come al venado y no es que dicho felino sea malo, ni bueno. Simplemente es.

Algunos más enajenados, como aquellos que hicieron hasta lo imposible por evitar la corrida de toros de Xico, Veracruz, hablan de ‘asesinato de toros’. Con una simple visita al diccionario nos daremos cuenta del significado del verbo ‘asesinar’: ‘Matar a una persona con premeditación o con otra circunstancia agravante’.

Son personas ignorantes que no ven la realidad. Que se escudan en una premisa falsa y la repiten una y otra vez sin ton ni son. Y vaya que ‘mi menda’ fue ‘uno de esos’, hasta que tuvo la fortuna gloriosa de acudir a una plaza de toros y atestiguar, libre de complejos, lo que sucede en una corrida de toros. Sin entrar en mayores detalles por cuestiones de espacio hay que subrayar que la carne del toro de lidia es carne de abasto para el consumo humano.

La celebración de un festejo taurino es una representación misma de la vida, ni buena ni mala. Problemas, circunstancias adversas, habrá siempre. Pero uno, como los toreros en el redondel, debemos hacerles frente de la mejor manera posible para salir avante. De lo contrario, los resultados no serán buenos. Y eso, en la dorada arena de cualquier coso taurino, queda en evidencia.

La crisis que vive hogaño la tauromaquia a nivel general puede revertirse. Hace falta que todo los profesionales taurinos cierren filas y caminen, juntos, en una misma dirección.

Esfuerzos en pro de la tauromaquia hay varios, pero son de manera aislada.

En el rubro mediático, preocupa que cada día hay menos espacios taurinos. A reserva de los portales especializados en la materia, en el grueso de los medios de comunicación la sección taurina no existe. Son pocos los diarios que mantienen una sección taurina diaria.

Todavía hay tiempo para revertir la crisis que nos afecta. Para eso, cada uno desde nuestra trinchera, toreros, subalternos, ganaderos, empresarios, periodistas y aficionados, debemos hacer lo que nos compete, llevarlo a cabo con la conciencia de hacer bien las cosas. Y si es de forma conjunta mejor, porque no hay que olvidar que ‘la unión hace la fuerza’.

Jugarán también un papel preponderante las personas cercanas al futuro presidente de México como el ganadero Armando Guadiana y Javier Jiménez Espriú, quien algún día presidió la comisión taurina. Si cada uno de nosotros ponemos nuestro ‘granito de arena’, mucho de puede lograr.

Para finalizar, la pregunta de la semana:

¿Qué reconocido personaje de la tauromaquia mexicana es el nuevo dueño de la plaza de toros ubicada en Santa Cruz del Monte 103?