*Foto: ALFREDO FLÓREZ
Este martes 15 de mayo por la mañana, el matador de toros Federico Pizarro, quien está en el año de su XXV aniversario de alternativa, anunció en breve rueda de prensa el arranque en julio próximo de su campaña de adiós a los ruedos como torero profesional.
El anuncio lo hizo en el legendario restaurante El Taquito, propiedad de Marcos Guillén, en las calles del Carmen, donde desde hace muchísimos años se han dado cita grandes personalidades de la farándula, la vida social y por supuesto, taurina.
Al respecto, el propio Pizarro de viva voz y algo nostálgica explica el motivo de esta decisión: “Como todo en la vida, todo tiene un principio y un fin, y por lo que se refiere a mi carrera taurina siento que este es el mejor momento de cerrar este ciclo en plenitud de facultades y toda dignidad. Mi deseo es terminar bien, con categoría, esta epata de mi vida, la más importante de ello, pues ya se me han abierto otros horizontes que me atraen de verdad, pero antes voy a dedicarme en cuerpo y alma a esta campaña del adiós y espero que a mediados de 2019 pueda hacerlo de manera definitiva”.
Hasta ahora, en 2018, Pizarro ha toreado dos corridas, la de San Cristóbal de las Casas y Puebla, pero el inicio de su última temporada taurina profesional será a partir de julio entrante y de ir integrándola se encargará de nueva cuenta su apoderado Adolfo Guzmán, con quien ya había trabajado y bien durante casi cuatro años.
En sus casi 25 años de alternativa, Federico Pizarro, quien ha toreado cerca de 600 corridas y ha sufrido 14 cornadas, además de un par de fracturas, para esta postrera campaña tendrá en su cuadrilla a los picadores Omar y Daniel Morales, así como a los subalternos de a pie Marco Antonio Montoya “El Mariachi” y Christian Sánchez.
Federico Pizarro, actualmente con 46 años, cinco meses y 15 días de edad, debutó como novillero en Apizaco, Tlaxcala, el 8 de abril de 1990 y se presentó en la Monumental Plaza México el 16 de junio de 1991, con el novillo “Vanidoso” de De Santiago.
Tomó la alternativa en Juriquilla, Querétaro, el 27 de noviembre de 1993, siendo el padrino el salmantino Pedro Gutiérrez Moya “Niño de la Capea” y el testigo Jorge Gutiérrez, con el toro “Cazador” de Fernando de la Mora.
Y la confirmó en la Monumental Plaza México el 25 de diciembre de 1994, con los mismos padrino y testigo del doctorado, cuando le fue cedido el astado “Azulejo” de don Javier Garfias.
Llegó a torear en España hasta 17 corridas, habiendo debutado en agosto de 1997 en el coso malagueño de Fuengirola. Además, llegó a pisar ruedos de Francia y sudamericanos de Venezuela, Colombia, Ecuador y Perú.
Sin duda, uno de las asignaturas que se le quedaron pendientes a Pizarro en su carrera fue el no haber tenido la oportunidad de confirmar en el coso Monumental de Madrid y eso si le ha podido mucho.
