Hermoso de Mendoza imparable; triunfa en Tafalla

FECHA: 18 de agosto de 2.014

LUGAR: Plaza de Toros de TAFALLA (NAVARRA).

ENTRADA: Lleno.

RESEÑA: Joao Moura (dos orejas); Fermín Bohórquez (vuelta); Pablo Hermoso de Mendoza (dos orejas); Manuel Manzanares (oreja); Miguel Moura (dos orejas); y Ginés Cartagena (dos orejas).

GANADERIA: Toros de Herederos de José Rosa Rodríguez.

 

CABALLOS:

Primer toro de la Ganadería de José Rosa Rodríguez, número 152, de nombre Etilista: De salida CHURUMAY (2 rejones de castigo); en banderillas CHENEL (2 banderillas) y DALI (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (dos cortas, un par de cortas a dos manos y un rejón de muerte).

 

CABALLOS DESPLAZADOS: BERLIN, DISPARATE, DUENDE, BELUGA y BOTERO.

 

COMENTARIO. Llegó la fecha tras esperada y deseada de la celebración de las bodas de plata como torero a caballo de Pablo Hermoso de Mendoza. Leyenda vida de esta especialidad, la figura de Hermoso se agranda cada tarde y cada día consigue alargar sus propios records. Para esta tarde tafallesa, el navarro se rodeó de amigos en el ruedo y fuera de él, con toreros de tres generaciones compartiendo paseíllo y con muchos amigos que también estuvieron en aquella tarde de 1.989 sentados en el tendido.

Diferentes estilos, diferentes conceptos y la estela del buen toreo portugués de manos de la familia Moura, los conceptos más clásicos de Bohórquez o de un cada día más asentado Manuel Manzanares o la explosión de la juventud y la alegría de Ginés Cartagena, cada día recordando más a su padre.

Entre todos ellos la majestuosa figura del estellés de nacimiento, pero tafallés de nacimiento taurino, que emergió en tercer lugar del festejo y que se adueñó del ruedo y de la voluntad del coso con apenas unos movimientos. Un toro, que como casi todos, acusan mucho el encierro y en principio no hizo por ir por CHURUMAY. Pasaban jinete y caballo por delante del astado y este ni inmutarse, hasta que en una de esas pasadas, Pablo le dejó el rejón de castigo en el lomo y aquí el toro aprendió de que iba aquello. Colocó un segundo rejón de castigo después de torear al toro con la bandera y acertó el jinete, porque el astado se asentó. No obstante el último capítulo para que embistiera con codicia y suavidad lo puso montando a otra leyenda de su cuadra. Un nuevamente espectacular CHENEL tardó poco en meterse al toro en las volandas de su cola y a comenzar a encelarlo de costado. Todavía el toro embestía pero con reservas y así llegó la primera reunión con CHENEL hecho un arco en la cara del toro. Esto dio paso a la apoteosis con un galope de costado, bravo, entregado, con un toro que embestía con rabia y un CHENEL que la canalizaba con su galope de costado y la convertía en estampa torear de tres voluntades en una. Esto fue rematado con un trincherazo por los adentros con el sello de CHENEL que terminó por reventar un tendido que ya estaba entregado al caballo. Pablo salió del trincherazo abrazado al cuello del caballo, pareciendo rememorar tantas y tantas tardes de gloria juntos. Hermoso había conseguido que el toro colaborase y DALI se encargó de continuar con la fiesta y con la exhibición de toreo y pronto comenzó a mostrar su cola a modo de capote, como si un doblador de los encierros de Pamplona se tratara. Cuando el toro tomo su cola lo templó para colocarlo en suerte y se separó para atacar de lejos y reunir la primera de las banderillas en el centro del ruedo. Los remates y adornos de la suerte fueron con las consabidas y esperadas piruetas, majestuosas y templadas ante un toro que todavía tenía cosas que dar. Continuó toreando y cambiando al toro de terrenos para seguir con su lidia con otra banderilla y otra seria de piruetas. Hacía tiempo que no veíamos las gradas de Tafalla tan entregadas y es que Pablo parecía que era todavía más ágil y elástico que hace veinticinco años y sobre todo con el tercio que firmaría a lomos de PIRATA. Primero colocó dos banderillas cortas llegando hasta el mismo morrillo del toro y rematando la buena preparación de la suerte del caballo. Arqueado y siempre mirando a la cara del astado PIRATA se arrimaba una y otra vez, se dejaba llegar al toro y su jinete lo aprovechaba para colocar las cortas y desplantarse sobre el testuz, flexionando los riñones y tocando con el codo al toro. Se superó PIRATA para que Hermoso dejase un par a dos manos que sigue siendo uno de los platos fuertes de su actuación y cuya ejecución es única en el toreo a caballo por la torería con que el caballo se reúne y terminó de volver a reventar el tendido cuando salió de la suerte agarrando los pitones de Etilista. Una obra perfecta, una faena de máximos trofeos, un torero entregado y un público agradecido que silencio el coso cuando Pablo volvió a irse frontalmente al toro pero ahora con el rejón de muerte. NO acertó ni a la primera, ni a la segunda, pero cuando el toro dobló después de un rejonazo al tercer intento la plaza se olvidó de los pinchazos y se volvió blanca de pañuelos para premiar y agradecer la tarde que Hermoso de Mendoza les había brindado.

Fue una tarde de brindis y agradecimientos donde Joao Moura, Fermín Bohórquez y Miguel Moura brindaron sus toros a Pablo Hermoso de Mendoza, donde Manuel Manzanares brindó el suyo a Pablo padre, Pablo y Juan Andrés Hermoso de Mendoza, donde el propio Pablo le brindó sus toros a sus compañeros de cartel y de carrera y a la Banda de Música de Tafalla que tantas tardes a amenizado sus faenas y donde también el Ayuntamiento de Tafalla y el Club Taurino Tafallés, agasajaron a Hermoso con unos recuerdos conmemorativos de estos 25 años de alternativa.