La Corte Constitucional de Colombia falló el martes en favor del regreso de las corridas de toros a Bogotá, suspendidas por la alcaldía hace más dos años, se informó oficialmente.
A través de un recurso de tutela o de amparo, dos de los tres magistrados estuvieron de acuerdo con los argumentos expuestos por la Corporación Taurina de Bogotá, que era la encargada de administrar la plaza de toros de Santamaría para la fiesta brava -la única de la ciudad-, explicó la oficina de prensa del tribunal, uno de los cuatro más importantes del país.
Según la sentencia, «se verificó la inminencia de un perjuicio irremediable para los derechos de libre expresión y debido proceso de la accionante, por la imposibilidad de celebración y difusión de un espectáculo artístico y cultural que requiere de la plaza taurina para su realización periódica y regular».
Gustavo Petro, un ex guerrillero de 54 años, fue elegido alcalde de Bogotá en octubre de 2011, y a los pocos días de asumir el cargo anunció su intención de eliminar las corridas de toros en la ciudad bajo el argumento de que había que impulsar eventos en pro de la vida y no de la muerte.
Aunque el alcalde no prohibió formalmente las corridas, se abstuvo de renovar el contrato con la Corporación Taurina, que ha argumentado que Petro no podía romper unilateralmente dicho acuerdo, el cual vencía en marzo de 2015.
La decisión de la Corte Constitucional se dio en momentos en que un grupo de 14 novilleros se encuentra en huelga de hambre en protesta por la desaparición de estos eventos taurinos. Hace 29 días ocho novilleros iniciaron la huelga, y con el correr de los días se les unieron seis más, indicó por teléfono Diego Torres, uno de los manifestantes.
Torres dijo el martes por la noche que no levantarán la huelga hasta que se sepa qué hará Petro tras el fallo de la Corte Constitucional. El alcalde no se pronunció de inmediato.
Son pocos los países del mundo donde se practica la tauromaquia. Uno de ellos es España, salvo en la región de Cataluña, donde están prohibidas las corridas. También se llevan a cabo en México, Venezuela y Perú, así como en Portugal, Francia y Ecuador, pero en estos últimos tres países no se permite matar al animal.
En Colombia la fiesta taurina se remonta al siglo XIX. Actualmente hay más de 300 plazas en todo el territorio nacional y se calcula que cada año se realizan un centenar de corridas.
Tan sólo en la capital es elevada la suma de dinero que mueve la tauromaquia. La temporada bogotana, que se lleva a cabo entre enero y febrero con seis corridas, genera unos 7.000 millones de pesos (unos 3,7 millones de dólares), según la Corporación Taurina.
En países como México y Venezuela, las corridas de toros cuentan con los escenarios más grandes de Latinoamérica. La Plaza Monumental en la Ciudad de México tiene capacidad para 40.000 espectadores, mientras que la Monumental de Valencia, en Venezuela, puede albergar a más de 20.000 personas.