La vida del diestro Ricardo Macías ‘El Estudiante’ ha sido cuesta arriba. No sólo por la dificultad que implica enfrentar un astado en el ruedo, sino por los ‘toros del destino’ que ha tenido que ‘lidiar’.
Hace poco más de tres décadas no ha podido cristalizar uno de sus sueños más grandes, confirmar la alternativa en la Temporada Grande de la Plaza México.
‘Mi vida cambió hace poco más de treinta años y de tener estabilidad vino un divorcio y me quedé como padre soltero, al pendiente de mi hija Victoria’.
‘De ahí fue todo muy complicado porque no es fácil ser torero y padre solo al mismo tiempo. Mi hija me acompañó a muchas ganaderías e incluso tiene como padrinos al ganadero de Covarrubias y al diestro César Pastor’.
Sin embargo, tuvo que hacer un paréntesis obligado por las circunstancias. Pese a ello siempre alimentó el sueño de ser torero.
Hogaño convertido en próspero empresario, Macías pudo tomar la alternativa en 2011. Pero aún tiene un sueño más por cumplir. ‘Quiero confirmar en la Plaza México. Mi apoderado, Miguel Ortas me ha comentado que hay posibilidades de hacerlo en la corrida que habrá de la Unión Mexicana’, afirma Ricardo, quien no pierde la ilusión de poder estrenar, en esa fecha, el vestido de la aguja que le hizo el maestro tapatío ‘El Charal’.
‘Espero en Dios tener la suerte de poder confirmar esta temporada. Nada me haría más feliz’, sentencia Macías.