PAMPLONA, España. Martes 7 de julio (Emilio Méndez, especial).- El peligroso hato de Jandilla que la mañana de este martes protagonizó el primer encierro de San Fermín salió a escena en la primera corrida de toros del serial. En el cartel el jerezano Juan José Padilla, el sevillano Pepe Moral y el madrileño Alberto López Simón.
Hacía gestos muy raros el primero de Jandilla al salir al ruedo no logrando encelarlo la cuadrilla de Juan José Padilla, quien quitó por chicuelinas y en el tercio de banderillas dejó dos pares de buena ejecución y un tercero al violín que gustaron al público. Muletazos por alto en tablas y un molinete para rematar el inicio de la faena. Arrollaba el toro y no se sentía a gusto el torero cuando, a raíz de la falta de fuerza, comenzó a embestir a media altura. Padilla no le encontró sitio al toro y cobró un estoconazo.
Bajo de casta era un cuarto que se las vio con un Padilla desdibujado en todo momento. No banderilleó. En faena, no atacó a un toro que se vino a menos por momentos, con poca fuerza y sosísimo en su conjunto. Además, anduvo desconfiado el torero de Jerez en un trasteo que no transmitió a los tendidos.
Menos estampa y falta de fuerza tenía el segundo. No se comportó bien en la voluntad de Pepe Moral para veroniquearlo ni tampoco en el quite de López Simón por chicuelinas. Inició la faena por cambiados en el centro del anillo, ligando dos series de derechazos a un toro que embestía con fiereza pero sin ritmo y al que no le pudo por abajo. Se enfadaba el de Borja Domecq cuando tocaba los avíos del torero costándole al astado entrar en la faena. Dejó naturales sueltos por bajo en el final, templado, acoplándose a la condición de un astado con una doble cara. Pinchó y dejó estocada.
Le rajó el capote a Pepe Moral el quinto, un toro con una cara agresiva y pitones astifinos. Brindó posteriormente a Saúl Jiménez Fortes tras la cornada gravísima de Madrid. Tenía franqueza el grandón de Jandilla en el inicio muleteril de Moral, cuando parecía que iba humillado y entregado. Mejor respondía el astado por el lado derecho, pues al natural daba gañafones y no se entregaba a la muleta. Más en corto por la diestra, intentó dejar derechazos sueltos en corto ante los apabullantes y amenazantes pitones del toro, ganándole a éste la partida en este epílogo muleteril. Se rajó el toro.
Quiso encelarlo a la verónica López Simón al tercero, un toro que parecía humillar de salida y que lo cuidó desde el primer momento la cuadrilla. Comenzó su faena por torerísimos estatuarios en el tercio, subiendo la temperatura de la faena en la siguiente tanda de templadísimos derechazos rematados con un pase de pecho largo. Más en corto en las dos siguientes tandas, el de Barajas comenzó a darle el pecho y enfrontilarse a un toro al que esperaba de forma genial, ligando de manera perfecta al astado. Bellísimos fueron los naturales finales por bajo y en la misma raya del tercio, templando aún más su embestida. De rodillas remató López Simón una faena a más en la que dejó un circular tremendo de hinojos en el que el toro hizo por él sin consecuencias. Una estocada al encuentro un punto baja selló la actitud del torero. Una Oreja.
Le dejaba muy bien el capote López Simón al sexto para inventarse la faena en la que lo sometió muchísimo bajándole la mano derecha. Gusto tuvieron sus muletazos por ese pitón antes de dejar naturales bajos a un toro que embestía a media altura. Más en corto lo intentó poco después, asentado entre los pitones del de Jandilla. Las manoletinas finales fueron de escándalo para dejar una estocada que lo tumbó sin puntilla. Dos orejas.
FICHA: Primera corrida y tercer festejo de la Feria de San Fermín. Coso Monumental de Pamplona. Lleno. Seis toros de Jandilla, impecables de presencia. Juan José Padilla: Silencio y silencio. Pepe Moral: Silencio y silencio. Alberto López Simón: Una oreja y dos orejas, con salida en hombros.