El diestro aquicalidense Alejandro López cerró su serie debutante internacional de compromisos en cosos peruanos, con el corte de tres orejas en la Feria de Pauza y dejando constancia de sus anhelos, se afirma, por conseguir un lugar de privilegio en esta difícil profesión.
Así que con dos actuaciones importantes y serias que le valieron el reconocimiento de la afición peruana los pasados domingo 26 y lunes 27 de este mes en el coso de Pauza, provincia de Ayacucho, fechas para las que Alejandro se preparó de manera intensa alternando con Paco Céspedes y César Vanegas, demostrando en ellas de manera contundente que no se reservó absolutamente nada para lograr el triunfo.
El domingo 26, ante un lleno, se informa, en la plaza de Pauza y lidiándose astados de diversas ganaderías, López logró una tarde contundente con dos actuaciones variadas, cubriendo los tres tercios y haciendo con su primero una faena con gusto y sabor, teniendo un toro que mostró bravura y nobleza. Alejandro se expresó toreramente por el derecho con mando y temple adornándose con el molinete y el cambiado de mano por delante, mostrándose certero con el acero dejando una entera en todo lo alto que le dio el corte de dos orejas.
Como segundo se enfrentó a un cornúpeta que se acabó pronto pero con el que el de Aguascalientes se ha jugado la vida en terrenos comprometidos con cabeza y gusto, extrayendo muletazos de gran calidad con la mano izquierda. Otro espadazo hasta las cintas que hizo brotar la petición generalizada para cortar una oreja y abandonar el coso en hombros como máximo triunfador del festejo.
La segunda tarde fue en ese mismo recinto y con el mismo cartel, lidiando ahora toros de las ganaderías de San Pedro y Salamanca que fueron difíciles y que desarrollaron sentido muy pronto. Desgraciadamente sólo la firmeza y la voluntad de Alejandro López pudo mostrar ya que con sus dos enemigos no tuvo materia prima, aunque se si la jugó de nueva cuenta, extrayendo algunos buenos muletazos estando por encima de los toros.
Al final, Alejandro López, se apunta, recogió el reconocimiento de parte de los organizadores como el máximo triunfador de la feria y así culmina su compromiso dejando un grato “sabor de boca” por aquellas tierras.