Como ya es sabido, durante los meses de mayo, agosto y septiembre el matador de toros aguascalentense Alejandro López ha logrado actuar en diferentes ferias peruanas con buenos resultados, recordando que su debut en esa tierras andinas fue en la localidad de Pausa, provincia de Ayacucho, donde pudo resultar triunfador cortando tres orejas en los dos festejos en los que tomó parte.
Ahora regresa a casa después de torear los pasados días 29 y 30 de agosto en la feria de Llapa, provincia de Cajamarca, ruedo en el que la espada lo privó de un triunfo más fuerte pero pudo dar cuatro vueltas al ruedo en las dos tardes que cumplió dejando una más que grata impresión con los toros de la dehesa de Salahual.
De ahí se trasladó a la localidad de Puno para actuar en Santa Rosa el reciente día 1 de septiembre y cortar un apéndice a los toros de Rural Alianza y al siguiente día 2 torear en Tayacucho, a una altura de 5 mil metros sobre el nivel del mar para despachar un corrida colombiana de San Isidoro y cortar dos apéndices, uno a cada uno de sus toros.
Así, Alejandro espera se siga abriendo las puertas para regresar a Perú y ratificar la buena impresión que dejó, además de servirle ello de proyección para empresas de México y otros sitios taurinos.