El reciente domingo 27 de septiembre en el rancho La Providencia, donde se ubica la dehesa de Arellano Hermanos, casa de la divisa en turquesa, coral y plata, sus propietarios don Rafael y don Gabriel Arellano, vecinos del municipio de Ojuelos, Jalisco, llevaron a cabo la prueba para sementales de dos toros procedentes de la finca de Bernaldo de Quirós.
De dicha tienta entonces se encargaron los matadores Arturo Saldívar y Alejandro López para que al final de cuentas ambos astados fueran desechados por no cumplir las expectativas de los ganaderos. Sin embargo, se informa, si sirvieron de mucho a los toreros para pulir sus respectivas propuestas toreras pues los bureles no fueron fáciles y echaron a andar el oficio y la técnica de los espadas.
Por un lado, el lidiado por Arturo, aunque cumplió en el caballo y obedeció a los toques, además de tener recorrido, no tenía la clase que se exige a un toro para ser semental en el campo bravo. Saldívar estuvo en torero a base de oportunos toques y de entender distancias idóneas para la lidia de este toro.
En tanto, el toreado por Alejandro presentó más complicaciones aunque fue bravo al caballo. En las telas, se hace saber, siempre exigió que la colocación fuera perfecta en cada muletazo para poder estructurar una labor interesante. Por ello, López anduvo solvente, retomando así el pulso del toro mexicano después de su campaña en Perú.