El diestro Alberto Huerta, convaleciente y dolorido de la terrible cornada que sufrió el domingo en Reynosa, dijo tras el duro percance que lo mantiene en una habitación de piso en el Hospital Santander de Reynosa que ‘lo que más me duele es el alma’.
En las primeras declaraciones que da a la prensa especializada, el torero confiesa que ‘es mi primera cornada. Había sufrido fracturas y diversas lesiones, pero esta es mi primera cornada’.
‘Antes que nada le agradezco a Dios por permitirme ser torero y seguir con vida. Fue una tarde de mucha emoción y gran responsabilidad’.
‘Había que salir a buscar el triunfo de una u otra forma. Quise salir a hombros pero salí herido. Así es la profesión’.
‘Cuando me llevaron a la enfermería yo quería salir a lidiar al toro. Sentía las piernas fuertes. Sin embargo, cuando me quitaron el traje de luces y vi el boquete comprendí que me iba a ser imposible volver al ruedo.
‘Ahora mismo puedo decirte que me duele mucho la cintura, tengo dolores muy fuertes pero si te soy sincero, lo que más me duele es el alma. Yo quería triunfar, era una tarde muy importante y por lo mismo había que jugarte todo a una carta’.
‘Ahora hay que esperar para que me recupere completamente y darle la vuelta a la página. Es en estos momentos cuando se tiene que demostrar que uno es torero’, señala Huerta, quien aprovechó para mandarle un saludo y su enorme agradecimiento a todos los que han estado al pendiente de su estado de salud. ‘Quiero agradecerle a todos los que han estado al pendiente de mi evolución. De verdad, gracias’.
‘Tuve la oportunidad de ver el video del percance y me queda claro que todo se debió al hambre de triunfo que hay que demostrar cada tarde en el ruedo. De momento no sé cuándo reapareceré pero yo ya quisiera volver a estar vestido de luces’.
Todos los que hacemos torosyfaenas esperamos la pronta recuperación del diestro Alberto Huerta.
* Fotos y video cortesía de EL CAPOTE REVISTA TAURINA
