Hoy se cumplen CIEN AÑOS del natalicio del inolvidable Jesús ‘El Ciego’ Muñoz, quien falleció el 2 de agosto de 2011.
Jesús “El Ciego” Muñoz nació el 29 de junio de 1916 en Salamanca, Guanajuato. Hombre pinturero como pocos, ha sido motivo de novelas y muchos escritos.
Quienes tuvimos el enorme placer de conocerlo y trabajar con él, lo recordarmos este día a cien años de que viera la luz primera… La luz, esa palabra que adoptó como suya y que aún, en tardes de toros, escuchamos en nuestra mente y en nuestro corazón. ‘¡Ay manito… A mí, mi luz…!’.
‘El Cieguito’, como se le conocía cariñosamente, es un referente de la fiesta brava mexicana , creador de la primera y singular agencia informativa taurina en el país.
En su agencia, toreros, apoderados, ganaderos, empresarios y los propios periodistas encontraban la noticia inmediata del acontecer taurino nacional e internacional y con su ejemplar dinamismo y camaradería proporcionaba a todos la información, claro, a cambio de su “luz”.
Siempre tendió la mano a cualquiera que llegase a su vera pidiendo apoyo.
“El Ciego” se describía a sí mismo como “torero, bailarín, cómico, periodista, poeta, trovador y chupacaña”.
Toreó en sus años mozos y al no encontrar fortuna se fue por otros caminos, sin embargo, su pasión por la fiesta lo conservó hasta el último momento de su vida.
Su recia personalidad abrió un lugar trascendental en la historia de la tauromaquia mexicana. Fue fuente de inspiración de Luis Spota en su libro “Mas Cornada da el hambre”, de Jorge López Antúnez en su libro “El Zopilote Mojado” y recientemente de “El Bardo de la Taurina” en su libro “Centro Histórico…Charlas Inéditas de ayer y hoy”.
Religiosamente, pasadas las 20:00 horas, los periodistas de la época nos comunicábamos al Hotel Coliseo, donde despachaba el gran Jesús Muñoz.
Hoy aquí, hemos querido rendirle un pequeño pero sentido homenaje.