ZEMPOALA, Hidalgo.- Una interesante tarde de toros se vivió en esta población hidalguense, en la que aunque no se cortaron orejas, resultó grata para los aficionados que agotaron el papel, por la apasionada entrega que derrocharon los alternantes.
Ante un lleno se lidiaron toros de Campo Grande, bien presentados pero de juego desigual en términos generales.
Abrió plaza Israel Téllez, quien con su nuevo apoderado el gran David Medina, le ha imprimido un toque personal y emocionante a su tauromaquia.
Aparentemente, el toro no tenía un solo muletazo, pero Téllez, convertido en gran lidiador, pudo domeñarlo y cuajar una faena en la que parecía no había nada.
El diestrro de Uriangato lució en su toreo a la verónica. Tras la suerte de varas se echó el capote a la espalda y cuajó espectaculares y temerarias gaoneras que le fueron ovacionadas.
Cubrió el segundo tercio con gran lucimiento y ya con la muleta, ante un burel aquerenciado en tablas, pudo trazar un trasteo poderoso en el que sometió al burel para torearlo a placer. Tras una estocada escuchó fuertes palmas.
El diestro guanajuatense está convertido en un gran lidiador y sorprendió gratamente al público asistente.
Sus alternantes, José Luis Angelino, José Mauricio y Manolo Roldán, por encima de sus respectivos ejemplares, escucharon sonoras ovaciones.
