El día de ayer a medio día falleció Elías González de la Rosa.
Una persona con una gran calidad humana y de los hombres que saben ser amigo de los amigos.
Inició a muy corta edad su andar en el mundo de los toros formando parte de la cuadrilla de niños toreros de la Laguna junto con Juan Manuel Ibarra, Luis Miguel Montero y Manolito Castrejon, toreando en un sin número de plazas del norte del país.
Posteriormente por su amistad con Arturo Gilio se convirtió en su hombre de confianza acompañándolo en toda su carrera taurina en los triunfos y los fracasos.
Con los años esa amistad se solidificó haciendo de este binomio una hermandad que los mantuvo unidos hasta el último momento.
Elías deja un gran hueco siendo siempre muy querido por la familia taurina de todo el país y más allá de las fronteras.
Buen hijo, buen hermano y buen Padre.
Descanse en paz Elías González de la Rosa.