El novillero Ángel Lizama ‘El Papo’ tomará la alternativa el 13 de noviembre en la corrida goyesca que se dará en el lienzo charro ‘Fernando Gamboa’ de Xmatkuil, Yucatán, donde tendrá como padrino al español Javier Conde y como testigo a Michelito Lagravere, con toros de San Salvador, ganadería propiedad de la familia Conde Medina.
El torero yucateco, que antes de vestir de luces llegó a ganarse la vida como chatarrero (click aquí para ver ese reportaje), cumplirá así una de las metas que se trazó desde la primera vez que vistió de luces, convertirse en matador de toros.
Llegará al doctorado con noventa festejos toreados. ‘En estos cuatro años que llevo como novillero tengo noventa festejos toreados’, dice contento ‘El Papo’, quien una vez cumplida su primera meta, enfocará sus baterías para cumplir otro de sus objetivos.
‘Mi otro sueño grande es poder comprarle una casa a mi mamá. Y se la quiero comprar con lo que gane como torero. Por eso mismo es que tengo que triunfar en cada plaza y en cada tarde, porque sólo así voy a poder cumplir mi sueño’, agrega el menudo matador de toros, quien es apoderado por el diestro Adrián Flores.
Previo al gran momento del ‘abrazo’, Lizama estará metido en las ganaderías de Quiriceo y San Salvador, cuyos propietarios han tenido a bien abrirle las puertas de sus fincas para que el futuro matador de toros afine y pula detalles de su técnica.
