A la edad de 99 años falleció hoy por la mañana El ganadero Fernando Ochoa Ponce de León.
A través de un boletín la Asociación Nacional de Criadores de Toros de Lidia, lamenta el fallecimiento de Don Fernando Ochoa Ponce de León, miembro del Consejo Consultivo de esta agrupación.
Don Fernando Ochoa Ponce de León es considerado la llama que iluminó el alma taurina de los michoacanos durante la segunda mitad del siglo XX. Nació en Morelia, Michoacán. Estaba a punto de cumplir 100 años de vida.
Empresario y ganadero, también toreó de corto. A él y a sus hermanos se debe la construcción de la plaza Monumental de Morelia.
Don Fernando Ochoa Ponce de León quien fuera propietario de la ganadería El Junco en el estado de Michoacán, es padre del también criador de toros de lidia, Don Fernando Ochoa Sánchez “Tiquis”, ganadero de “Viuda de Emilio Fernández”; además, abuelo del matador y actual apoderado Fernando Ochoa, y, por añadidura bisabuelo del novillero Patricio Ochoa.
La ganadería El Junco fue adquirida por Don Fernando Ochoa Ponce de León en 1965. Fue instalada en Zinapécuaro, Michoacán. Se presentó en la Plaza México con seis novillos para Rogelio Morales, Miguel Ángel Martínez El Zapopan y José Luis Ortega, el 4 de agosto de 1974.
Su primera corrida a la Plaza México fue lidiada el 24 de febrero de 1991 por Curro Rivera, Mariano Ramos y David Silveti, que cortó una oreja del que cerró plaza.
Por otra parte, Francisco Dóddoli cortó tres y un rabo la tarde del 4 de junio de 1994 en San Pedro Xalostoc. El 30 de septiembre de 1998 en Morelia, Michoacán, Eulalio López “Zotoluco” tuvo una tarde extraordinaria, pues se llevó cinco orejas en un mano a mano con Fernando Ochoa. En Jalpa, Zacatecas, el primero de enero de 1999, Federico Pizarro cortó tres orejas y un rabo, mientras que Miguel Lahoz se llevó tres orejas.
Posteriormente refrescaron sangre con vacas escogidas en tienta de Mariano Ramírez y sementales de Javier Garfias, Piedras Negras, Mimiahuapam, Reyes Huerta y San Martín (Chafik), este último con sementales vía Sánchez Fabrés Herederos y Victorino Martín, ambas procedencia pura Santa Coloma.
En 1991 recibió el premio como el mejor encierro de la temporada de la México, además recibió el trofeo al mejor toro, el No. 42 de nombre “Churumbel”.
Repitió la hazaña recibiendo el trofeo al mejor encierro de la temporada 2008 – 2009 de La México, en la que el hijo del ganadero Don Fernando Ochoa Ponce de León y encargado de la ganadería Junqueña, el Ing. Fernando Ochoa Sánchez “Tikis” dio sendas vueltas al ruedo en dos tardes distintas.
Desde aquí, nuestro más sentido pésame.