PLAZA MÉXICO: Esta tarde ¡Perera, Sánchez y Silveti, con Montecristo!

La Temporada Grande Internacional 2016-2017 en la Monumental Plaza México, ahora bajo el manejo y dirección de la innovadora empresa “TauroPlaza México” habrá de reanudarse este domingo 22 de enero con el anterior horario, es decir, a las 16:30 horas, para dar paso a la que será undécima corrida de este serial mayor en la capital del país.

Como se sabe, para esta segunda etapa de la campaña en la que se anunciaron seis corridas más, la de este domingo reviste un gran interés pues en la combinación aparecen los nombre de dos de los espadas que en la actual temporada ya “tocaron pelo” y el otro estuvo cerca dando una vuelta al ruedo, además de que la procedencia del ganado es de suma garantía para el buen desarrollo del festejo.

Así pues, en la tercia en turno están puestos los diestros, el badajocense Miguel Ángel Perera, el aquicalidense Juan Pablo Sánchez y el irapuatense Diego Silveti, quienes habrán de lidiar, reiteramos, a partir de las 16:30 horas, un encierro de la afamada dehesa de Montecristo, casa de la divisa en obispo, verde y oro, propiedad de don Germán Mercado Lamm, vecino del municipio de Hueyotlipan, Tlaxcala.

Recordamos que en la reciente sexta corrida de la temporada, el domingo 4 de diciembre de 2016, con ganado de Julián Hamdan, Juan Pablo Sánchez le cortó una oreja a su primer ejemplar llamado “A Flor de Piel”, en tanto que esa misma tarde, el extremeño Miguel Ángel Perera sólo dio una vuelta al ruedo luego de la faena que le realizara a “Don Rafael”, el primer astado que le tocó en suerte en tal ocasión.

Y el siguiente sábado 10 del mismo mes, en la séptima corrida del serial y primera de las tres con las que se revivió la Feria Guadalupana, Diego Silveti le “tumbó” una más que meritoria oreja al astado que cerró el festejo, de Santa María de Xalpa, de nombre “Dije”.

Así que los ingredientes están listos para que este domingo 22 de enero, el primero en el calendario taurino de la Monumental Plaza México, se cocine un bueno y suculento banquete de toreros y ganado bravo y, sobre todo, que lleve un importante número de aficionados a los tendidos del remozado, bello y gran coso de la Avenida de Los Insurgentes. Que Dios reparta suerte.