Columna Alternativa: Primeros espadas chipén

Primeros espadas chipén

Por Gustavo MARES

 

Hace algunos días este reportero tuvo la oportunidad de escuchar a un matador de toros de la nueva generación, que reconocía la maestría de algunos toreros con varios años de alternativa y que son un gran ejemplo de lo que en el colectivo popular supondría un primer espada.

Son toreros con una sólida técnica, demostrada cada tarde que visten de luces. Curtidos en mil batallas. Diestros a los que nadie les ha regalado nada y que conocen la miel y la hiel de la fiesta brava.

Algunos de ellos torean más que otros. Sin embargo, hay una constante, ninguno torea la cantidad de festejos que en realidad deberían de estar toreando.

En esta época de sus respectivas carreras, toreros como Federico Pizarro, Ignacio Garibay, José Luis Angelino e Israel Téllez, mencionados en estricto orden de antigüedad como matadores de toros, podrían fungir como ‘la cereza en el pastel’ en su papel de ‘primeros espadas’, porque son diestros muy enrazados, que el público arropa habitualmente porque sabe que no se guardan nada en una plaza de toros.

Imagine usted, en los meses que están por venir, que las empresas importantes tomen en cuenta a estos toreros para programarlos con los diestros nacionales de la parte alta del escalafón y con menos años de doctorado, complementados con las principales figuras europeas, pues los ‘coletudos aztecas’ mencionados líneas arriba tienen, algunos de ellos, mayor antigüedad para partir plaza.

Ahora mismo, en esta época en la que no se vislumbra en el panorama taurino nacional una abundancia de novilleros próximos a tomar la alternativa o jóvenes diestros para confirmarla, la figura del ‘primer espada’ cobra vital importancia para rematar las combinaciones.

En pro del espectáculo taurino y a diferencia de algunas épocas del toreo, en la que el diestro que abría plaza muchas ocasiones salía en ‘plan de comparsa’, hogaño cuando cada puesto en un cartel es más codiciado que ‘agua en el desierto’, la inclusión de ese tipo de toreros le da un atractivo muy especial al festejo pues es casi seguro, que desde que salte el primer toro a la arena el nivel de exigencia dentro del ruedo será mayúsculo. Son primeros espadas ‘chipén’.

Un simple ejercicio abre un abundante abanico de posibilidades. Juzgue usted. Entre paréntesis, el mes y año de alternativa: Federico Pizarro (noviembre de 1993); Juan José Padilla (junio de 1994),  José Tomás (diciembre de 1995); ‘Morante de la Puebla’ (junio de 1997) Julián López ‘El Juli’ (septiembre de 1998);  Ignacio Garibay (octubre de 1999); Sebastián Castella (agosto de 2000);  José Luis Angelino (noviembre de 2000); Israel Téllez (diciembre de 2001); José María Manzanares (junio de 2003); Miguel Angel Perera (junio de 2004); Alejandro Talavante (junio de 2006); José Garrido (abril de 2015) y Andrés Roca Rey (septiembre de 2015).

Ahora bien, valdría la pena conocer cuántos de los toreros extranjeros de la lista estarían dispuestos a compartir créditos con los toreros mexicanos mencionados, puesto que les implicaría una dura competencia desde el primer momento. El más beneficiado, el público.

Al final del día son las empresas las que tienen la última palabra. Pero de que los aficionados verían con mucho agrado la inclusión de esos toreros en carteles de relevancia, no hay la menor duda.

Para finalizar, la pregunta de la semana: ¿Qué importante plaza de toros de nuestro país abrirá sus puertas el cabalístico día 13 del próximo mes?