La Fiesta de los Toros se ha cubierto de nuevo con el velo de luto luego de saberse que este lunes 31 de julio de 2017, a la edad de 82 años, dejara de existir quien en sus tiempos mozos fuera torero, maestro de toreros, empresario taurino, apoderado y juez de plaza, el coahuilense Marcelo Acosta Trejo, mejor conocido en el medio taurino como el “Hermano Lobo”.
Entre los toreros a los que les manejó sus asuntos taurinos profesionales destacan el diestro portugués Óscar Rosmano, el rejoneador Ramón Serrano y su paisano el matador Arturo Gilio desde su etapa de novillero y con el que vivió sus mejores pasajes.
Además, Acosta fue yerno del reconocido espada poblano Antonio Campos “El Imposible” y de la torera Carmela Hernández, debido a su matrimonio con Lucero Hernández y con quien procreó dos hijos, Lucero y Carlos Acosta Hernández.
Marcelo Acosta Trejo nació en Torreón, Coahuila, el 19 de agosto de 1934. Actuó en muchas tardes como sobresaliente al lado del rejoneador Gastón Santos y siendo novillero destacaron sus grandes triunfos en la antigua plaza “El Progreso” de Guadalajara, Jalisco. El 26 el mayo de 1963 debutó en la Monumental Plaza México, tarde por cierto en la que resultó corneado.
Sus mejores éxitos los tuvo en ruedos portugueses, aunque también toreó en cosos de España y Sudamérica.
Marcelo fue un hombre muy querido en el ambiente taurino por su sencillez, su don de gente, su estupendo buen humor, sus inagotables anécdotas y sus valiosas enseñanzas.
Tras ser pasado por el crematorio, sus cenizas fueron veladas en la agencia funeraria Serna, de Gómez Palacio, Durango y después se celebró una misa en el mismo sitio. Desde esta redacción enviamos nuestro más sincero pésame. Descanse en paz.