EDUARDO PUERTO, corresponsal
POMUCH, Campeche.- La Plaza La Ronda se llenó para atestiguar el debut del mexicano Diego Silveti en el sureste mexicano. Ambientazo y calor de 37 grados.
Se lidió un bonito encierro de Pozohondo, con calidad aunque con poco fondo. Sobresalió el tercero, que mereció arrastre lento.
El potosino Fermín Rivera enfrentó el lote malo. Anduvo esforzado y escuchó palmas.
El guanajuatense Diego Silveti se convirtió en el triunfador del festejo. A su primero, el mejor de la tarde, le cuajó una faena de altos vuelos tanto de capote como de muleta.
Toreó con cadencia a la verónica. Con la tela escarlata pergeñó pases de mucho temple, ligados y de mano muy baja. El torero de dinastía se gustó en series largas ‘de aquí hasta allá’.
Rubricó su labor con ajustadas benardinas.
Una faena de figura como la que trazó no podía tener menos que una rúbrica especial y Diego se jugó todo en la suerte suprema. Cortó las dos orejas. Dio triunfal vuelta al ruedo en compañía de los ganaderos Ramíro Alatorre, padre e hijo. Con su segundo, palmas.
El aguascalentense Gerardo Adame, todo deseo y ganas de agradar, oreja y ovación.
Al término del festejo Silveti salió a hombros.