El novillero queretano Diego San Román, de 22 años de edad, lleva toreados cinco festejos con picadores desde su debut en León este mismo año. Antes ya había sumado más de veinte festejos sin varilargueros entre Francia y España.
Hijo del matador de toros Osca San Román, el chaval queretano que está por concluir la carrera de Administración de Empresas tiene la ilusión al límite porque este sábado actuará en el Cortijo Campo Bravo de San Juan del Río, donde sostendrá un mano a mano con Héctor Gutiérrez, triunfador de la México. Sobre este compromiso, el torero afincado en Querétaro señala: ‘Es una cartel de gran responsabilidad. Hay buen ambiente. Además forma parte del serial Soñadores de Gloria’.
Apoderado por el español Alberto Elvira, considera que el esfuerzo diario poco a poco rinde frutos: ‘La preparación es muy importante en un torero. Creo que la constancia y el esfuerzo que le imprimo a mi carrera taurina están dando resultados’.
El chaval queretano sufrió, en marzo pasado, una fuerte lesión ósea que le llevó al quirófano. Tiene además de ese percance, otras cuatro fracturas y severas contusiones, aunque ninguna de estas fueron obra del ‘de negro’. Resulta que antes de abrazar la profesión de torero era piloto de motocross: ‘En las motos sufrí varios percances. Uno de ellos, el más serio, me mantuvo inconsciente todo un día’, confiesa Diego, quien durante esa última convalecencia ‘soñé a un tío que había muerto y que había sido forcado. Fue algo muy personal y ahí me di cuenta que mi vocación no estaba en las motocicletas sino en el toreo’.
Este fin de semana el joven torero hará doblete. El domingo actuará en Tlaquepaque, antes el sábado partirá plaza en el Cortijo Campo Bravo de San Juan del Río, Querétaro, mano a mano con Gutiérrez y novillos de La Antigua, festejo que comenzará a las 17:00 horas.