Por Mary Paz Gonález/Foto: Efrén González
AGUASCALIENTES.- Es una pena que la empresa haga el esfuerzo por colocar en los carteles de la Feria Nacional de San Marcos, en el coso Monumental de Aguascalientes, a los toreros de la tierra, a los consagrados y a los que están en busca de un sitio importante, concretamente a éstos últimos pues se les programa en un cartel llamado del ‘Orgullo San Marcos’, y que la gente no acuda a verlos poblando en menos de la mitad del aforo de la plaza no es justo, cuando la verdad se tiene que estar ahí para apoyarlos pues igual se juegan la vida.
Aún así, los aficionados que acudieron lograron ser testigos del triunfo de Diego Sánchez al cortar más que merecidamente la única oreja del festejo, cuando pudo haber salido con más apéndices pero al fallar con la espada se privó de ello. Su alternante Diego Emilio se topó con el peor lote, se la jugó y hasta un fuerte pitonazo en el cuello se llevó. Y José María Pastor estuvo por demás en torero toda la tarde, aunque sin suerte a la hora buena.
Se lidiaron seis toros de varias dehesas de la región, siendo el mejor el corrido en cuarto lugar, de Claudio Huerta, que le pasó de noche al juez ya que merecía el arrastre lento. Regulares resultaron los de Corlomé, Rosas Viejas y Medina Ibarra. De pésimas condiciones fue el de Campo Grande y peligroso el de La Punta.
Diego Sánchez, oreja y vuelta al ruedo; Diego Emilio y José María Pastor, palmas en sus respectivos lotes.
La única oreja de la tarde la cortó Diego Sánchez al burel de Corlomé, ‘Arte Grande’. Estuvo empeñoso con el capote. Tras el segundo puyazo, Diego Emilio realizó un quite por navarras y Sánchez le replicó por gaoneras. Con la muleta, tras brindarle a Arturo Macías, realizó valeroso el toreo derechista, con temple y largueza. Acortó distancias y mejor lo hizo, demostrando firmeza. Acabó de estoconazo y por ello obtuvo una merecida oreja.