La matadora de toros michoacana Hilda Tenorio abandonó el hospital, luego de la grave cornada que sufrió la semana pasada en la Plaza El Relicario de Puebla. Este percance le dejó como saldo 17 fracturas en el rostro, por lo que tuvo que ser sometida a una intervención quirúrgica en la que le colocaron placas y tornillos.
Fueron los padres de la torera los que le acompañaron durante la salida del sanatorio.
La evolución de Hilda ha sido favorable por lo que decidió hacer el viaje hasta la capital de Michoacán, pues hasta hace unos días tenía la intención de quedarse en Cholula para acudir a revisión.
Sin embargo, si la mejoría avanza podrían retirarle los puntos de sutura en Morelia, ya sin necesidad de hacer el viaje a Puebla.