La dehesa queretana Los Cués abrió las puertas de su casa para realizar la prueba de bravura de cuatro de sus becerras. Los ganaderos Ángela Garfias y Raúl Lebrija brindaron la oportunidad de asistir a ese importante pasaje el campo bravo, al novillero Sebastián Ibelles.
El tentadero no podía caer en mejor momento para el mexiquense Ibelles, quien se encuentra en plena etapa de preparación de cara a la presente temporada en tierras mexicanas, donde desea mostrar los avances que ha conseguido. Se trató literalmente de “oro molido” para él, dado que para un muchacho que inicia su camino en la fiesta brava, no hay cosa más apreciada que estar en contacto con la embestida de los astados.
¡Y qué mejor que poder torear bajo la supervisión de dos matadores experimentados como José Mauricio y Diego Silveti, quienes encabezaron las labores camperas!
Recibir en directo las indicaciones de ganaderos y de matadores, ha resultado altamente productivo para Sebastián Ibelles, quien, en su oportunidad se dio “vuelo” con la bravura que mostraron las hembras que se midieron con el picador y luego con las muletas de los diestros y esas becerras pusieron el alto el color de la divisa naranja y blanco.
La jornada que se llevó a cabo en el municipio de Huimilpan, Querétaro, sirvió a este novillero para continuar evolucionando a conciencia, por lo cual está agradecido con todos aquellos que le permitieron disfrutar a plenitud de dicha experiencia.