El ingeniero regiomontano Edmundo Gil dejó de existir ayer, justamente cuando este mismo día se están cumpliendo dos años del fallecimiento del torero al que siempre siguió y admiró, Miguel Espinosa ‘Armillita Chico’. Ahora ya están juntos en el cielo de los taurinos.
Desde aquí, nuestro más sentido pésame.