*Foto Ángel Sainos
PUEBLA.- Ni la fría noche pudo apagar el ánimo de los toreros anunciados en la Plaza El Relicario de esta bonita ciudad del altiplano, donde se lidió un burel de El Batán para rejones, y de La Punta para los diestros de a pie, bien presentados y de juego desigual.
El rejoneador yucateco Cuauhtémoc Ayala, en compañía de los Forcados de Puebla, vuelta al ruedo.
A pie, Jerónimo, con un buen burel, corrió la mano a placer para cortar las dos orejas. A su segundo, el torero poblano le cuajó una gran faena que malogró con los aceros por lo que todo quedó en una vuelta al ruedo.
El guanajuatense Diego Silveti, recuperado de la tremenda voltereta que sufrió en la Plaza México, le cortó una oreja al primero de su lote, luego de una faena artística. Con segundo, uno de los astados menos potables, el diestro de dinastía estuvo por encima, desafortunadamente erró con los aceros y escuchó dos avisos.
El aguascalentense Luis David, con su primero, saludó desde el tercio. Al que cerró plaza, cerca de la media noche, le cuajó un ‘faenón’ que caló hondo en el ánimo de la afición. Tras un espadazo hasta la empuñadura, y a petición popular, cortó las orejas.
Al término de la función, Jerónimo y Luis David salieron a hombros.
