España, en la mira de Arturo Gilio 

*En tanto, el esforzado y activo novillero lagunero se mantiene de lleno en el campo bravo nacional tal y como lo hizo recientemente en Montecristo

ADIEL ARMANDO BOLIO

Uno de los novilleros, si no es que el único en el país, que ha llevado a cabo una intensa preparación en el campo bravo de nuestra geografía taurina, es, sin duda, el joven coahuilense Arturo Gilio, quien hace tres días estuvo en la ganadería tlaxcalteca de Montecristo, propiedad de don Germán Mercado Lamm, a invitación del propio ganadero.

Fueron dos días de arduas labores de campo, siendo el primero apenas el reciente jueves 15 de este mes, donde se comenta el propio Arturo Gilio y el también novillero queretano Andrés García, hermano del matador de toros “El Payo”, se dieron gusto probando nueve vacas que resultaron buenas y sus embestidas fueron aprovechadas cabalmente por los mencionados tentadores.

Luego, el viernes 16, se incrementó la intensidad de las tareas camperas al tentarse ocho novillos para sementales, con los cuales, el matador de toros Fermín Rivera, así como el novillero Arturo Gilio, pudieron poner en práctica sus respectivas tauromaquias y así dar rienda suelta a la imaginación y plasmar en el ruedo el toreo de calidad, cada uno en su personal forma de interpretar el toreo y, claro, acorde a las características y exigencias de cada novillo.

De esta manera, se dice que Arturo no quita el dedo del renglón y continúa alistándose con miras a regresar a España en cuanto las condiciones sanitarias lo permitan. Mientras tanto, se ha venido aplicando en obtener la visa de trabajo para poder hacer el viaje, lo cual podría suceder en mayo entrante pues se sabe que el primer compromiso que tiene para iniciar su temporada en ruedos ibéricos sería en el mes de junio, concretamente el domingo 20.

Todo, se hace saber, con el propósito de convertir a Gilio en un torero internacional, teniendo la mira puesta en que su alternativa pueda darse a finales de este año o principios de 2022 y que sea suelo europeo, con toda la fuerza y categoría que se pueda.