La Conferencia del Episcopado Mexicano dio a conocer que este lunes dejó de existir el Obispo Emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, quien atesoraba gran pasión por la tauromaquia, al grado de llevar por algún tiempo los poderes del diestro tapatío Xavier Ocampo.
Su deceso causó profundo pesar en diversos ambientes en los Cepeda Silva se desenvolvía.
Onésimo Cepeda contaba 84 años.
El obispo se encontraba internado desde hace algunas semanas, debido a complicaciones derivadas del covid-19.
La noticia fue confirmada por la Diócesis de Ecatepec a través de su cuenta oficial de twitter.
También la Arquidiócesis Primada de México dio a conocer la noticia y se unió a la oración por el eterno descanso del Monseñor Onésimo Cepeda Silva.
El pasado 9 de enero se dio a conocer que el líder religioso se contagió de Covid-19 y había sido conectado a un respirador artificial.
La importancia de este personaje trasciende el ámbito religioso, pues en su vida el obispo no solo ha tenido presencia en esta esfera, sino también en la política e incluso en la empresarial, lo que lo ha llevado a ser calificado como un personaje “controvertido” dentro de la vida pública del país.
JOVEN EMPRESARIO
Mucho antes de unirse a la comunidad católica se sabe que Onésimo Cepeda, con tan solo 26 años de edad, se volvió cofundador junto con el empresario Carlos Slim de la Bolsa Inversora Bursátil S.A. de C.V. en el año de 1964, empresa que hoy conocemos como Grupo Financiero Inbursa.
Desde entonces su paso por la vida empresarial fue fructífero, pues trabajó con personajes como Roberto Hernández Ramírez, presidente de Grupo Financiero Banamex, como director ejecutivo de Banamex Citigroup, más tarde para la empresa Ingenieros Civiles Asociados (ICA) y hasta para empresas como Televisa, entre otras marcas.
Sin embargo, debido a que en el pasado estudió Filosofía en el Seminario de los Misioneros de Guadalupe (1961-1964) y Teología en la Universidad de Friburgo en Alemania (1966- 1970), el 28 de octubre de 1970 Cepeda fue ordenado como sacerdote en Cuernavaca, donde tuvo varios cargos y desde donde inició su vida religiosa.
Pese a lo anterior, no fue sino hasta el año de 1995, cuando el Papa Juan Pablo II lo nombró como el primer obispo de la Diócesis de Ecatepec, con lo que entró a las grandes ligas de la Iglesia mexicana. Así, tras 17 años de servicio presentó su renuncia al Papa Benedicto XVI, la cual aceptó el 25 de mayo de 2012 debido a que Onésimo había cumplido 75 años de edad.
POLÉMICO
Los años que pasó el obispo Cepeda dentro del ámbito empresarial y religioso del país lo llevaron incluso a estar muchas veces en medio de diversas polémicas, debido a su cercanía con figuras públicas y políticas del país, lo que incluso lo llevó a tener confrontaciones con figuras de la izquierda mexicana.
Tal es el caso de un cruce de declaraciones con el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, contra quien se abalanzó durante la campaña del año 2006 tras considerar como “estupideces” las declaraciones que el candidato presidencial lanzó en contra del entonces Instituto Federal Electoral (IFE ahora INE).
Años antes ya había tenido de igual manera roces con Rosario Robles, ex presidenta del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y exjefa del Gobierno capitalino, a quien en respuesta a una crítica en contra de la administración mexiquense le contestó “vino a cacarear aquí, en mi gallinero, y cuando cacaraquea una gallina en mi gallinero se encuentra con un gallo”.
CONTENDER
El último episodio en el que se vio involucrado el obispo ocurrió durante las elecciones federales del pasado 2021, cuando informó sobre su decisión de contender por una diputación plurinominal por Ecatepec, a pesar de seguir formando parte de la Confederación de Episcopado Mexicano, lo que le prohibía entre otras cosas aceptar cargos públicos y participar activamente en partidos políticos.
Al respecto la Iglesia Católica tuvo que publicar un comunicado en el que se deslindaba de todo acto político del obispo Cepeda, tras informar que este no contaba con el permiso eclesiástico para contender por un cargo público. Pese a lo anterior, aseguró que la decisión final quedaba en manos de las autoridades electorales del país. Al final Cepeda decidió renunciar a su intención, fecha desde la que se había mantenido sin presencia en medios.
Desde aquí, nuestro más sentido pésame.