El matador de toros español en el retiro, Miguel Báez ‘Litri’, quien hace un par de días dejó de existir, fue sepultado este domingo (tiempo de España) en Huelva en el panteón de la familia, tras una misa de cuerpo presente en el que se dieron cita una gran cantidad de personalidades del medio taurino.
Miguel Báez «Litri» dejó de existir a la edad de 91 años, tras sufrir una larga enfermedad que le tenía apartado de la vida pública, y que incluso le llevó a perderse la boda de su hijo, también matador de toros.
Aunque nació en la provincia de Valencia (este), se crió y se hizo torero en Huelva, desde donde salió como novillero para formar con Julio Aparicio una de las parejas de toreros más célebres del siglo XX. Y era además Hijo Prediclecto de esa ciudad.
Tras tomar la alternativa el 12 de octubre de 1950 en la plaza de Valencia, también junto a Aparicio, Litri fue una de las figuras más populares de los ruedos en el siglo pasado, con una gran regularidad en el triunfo, practicando un toreo de línea «tremendista».
En una carrera plagada de idas y venidas, actuó por última vez vestido de luces en septiembre de 1987, cuando le dio la alternativa a su hijo en el anfiteatro romano de Nimes (Francia), el mismo dÍa que también Paco Camino lo hacía con su primogénito Rafael.
Desde 1963 se dedicaba a la ganadería de reses bravas en Huelva, de la que más tarde se hizo cargo su hijo.
Su estado de salud le impidió asistir a la segunda boda de si hijo Miguel Báez Spínola, quien anteriormente estuvo casado con Carolina Adriana Herrera, hija de la diseñadora colombiana Carolina Herrera.
