Columna Alternativa: El artículo quinto

El artículo quinto

Gustavo Mares

Será mañana, cuando en un tribunal administrativo, se defina el rumbo de la fiesta brava en la alcaldía Benito Juárez, luego de que un juez admitiera un amparo de una asociación de veganos.

La prohibición que se ciñe sobre la actividad taurina en la demarcación en la que se encuentra la Plaza de Toros México resultaría anticonstitucional. Hay que recordar que nuestra Carta Magna nos permite a todos los mexicanos desarrollar cualquier actividad lícita para ganarnos la vida.

El artículo quinto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos es clara al señalar que: ‘A ninguna persona podrá impedirse que se dedique a la profesión, industria, comercio o trabajo que le acomode, siendo lícitos. El ejercicio de esta libertad sólo podrá vedarse por determinación judicial, cuando se ataquen los derechos de tercero, o por resolución gubernativa, dictada en los términos que marque la ley, cuando se ofendan los derechos de la sociedad. Nadie puede ser privado del producto de su trabajo, sino por resolución judicial’.

Las autoridades están dejando de lado están dejando de lado las autoridades es la importante derrama económica que dejan las corridas de toros por conceptos de impuestos.

Según algunos estudios de la asociación Tauromaquia Mexicana, que defiende y difunde la tauromaquia en diversos frentes, los espectáculos taurinos generan al año una derrama económica de seis mil 900 millones de pesos, esas cifras fueron avaladas por la Secretaría de Agricultura en 2019, previo a que estallara la crisis sanitaria por el Covid-19.

En cuanto a los ingresos fiscales para el estado por ese rubro, la cantidad asciende a más de 800 millones de pesos.

En el terreno de las fuentes de empleo, una decisión como la de prohibir las corridas de toros en la Alcaldía Benito Juárez afectaría la creación de más de 225 mil empleos directos e indirectos, además de que se afecta a miles de aficionados que disfrutan del arte de lidiar reses bravas.

Parece poco creíble que en esta época, en la que la comunicación avanza a pasos agigantados, haya poderes públicos, que quieren imponer una moral absurda y sentimentalista.

Muchos especialistas en la materia han señalado que ‘humanizar’ a los animales es enfermizo. El toro bravo es una especie que sin fiesta brava estaría destinada a desaparecer, porque su manejo es muy costoso, además de peligroso, a diferencia de ganado Angus, por ejemplo. En lo que respecta a las hembras, una vaca brava apenas da leche para sus crías y no como las Holstein.

Hay voces cargadas de ignorancia que señalan que el toro bravo puede vivir en reservas destinadas ex profeso. Nada más alejado de la realidad. El algunos zoológicos de Italia y Alemania intentaron tener toros bravos en exhibición, pero es imposible por la bravura de ese ganado en específico.

La suspensión decretada es provisional y no definitiva. Se trata de una medida administrativa que regirá en principio hasta el jueves, cuando el juez escuchará los argumentos y analizará las pruebas de las partes involucradas para tomar una resolución de fondo.

Para finalizar, la pregunta de la semana: ¿Qué pasará?