Triunfal salida en hombros de Joselito y Gutiérrez

AUTLÁN DE LA GRANA, Jalisco. Martes 21 de febrero (Emilio Méndez, especial).- Se dio el cerrojazo de las tradicionales fiestas de carnaval con la cuarta corrida de toros, ésta mixta, registrándose un lleno en tarde agradable, resultando triunfadores Joselito Adame, por el corte de tres orejas y un rabo y, Héctor Gutiérrez, al cortar tres apéndices para al final ser izados en hombros. El caballero en plaza Tarik Othón malogró su actuación a la hora buena, aun así, dio vuelta al ruedo en un ejemplar de regalo.

Se lidiaron siete astados de la ganadería jalisciense de San Constantino, tres de ellos para rejones, uno de regalo, siendo buenos los dos primeros y también el de obsequio y, de los de la lidia pie, el tercero fue muy bueno, con arrastre lento: el primero no fue fácil, el segundo tuvo bravura, pero vino a menos y, el cuarto, tuvo peligro.

En el burel que abrió plaza, con movilidad y trasmisión, el rejoneador novillero queretano Tarik Othón inició bien en la colocación de dos fierros de castigo para luego lucir con su cuadra, poner banderillas al cambio, exponiendo y, sobre todo, emocionando a la concurrencia. Templó a la grupa. Clavó otros dos garapullos al cambio exhibiendo buena monta. Dejó palos cortos en un palmo de terreno. Falló con el rejón mortal y terminó a pie descabellando para ser silenciado.

A su segundo, alegre y con movilidad, Tarik lo aprovechó bien. Le clavó dos rejones de castigo para así empezar a realizar una faena elegante y de buen gusto en el manejo de sus cabalgaduras. Puso banderillas al cambio y exponiendo. El trasteo fue a más, vinieron otros palos al cambio, cortas también para emocionar al público y dejó el rejón de muerte algo caído. Descabelló a pie, se le aplaudió y le sonaron un aviso, pero, al final, la gente se le entregó a Othón.

Regaló Tarik un séptimo ejemplar, de la misma dehesa titular, de buen juego y que brindó al ganadero y empresario local Juan Pablo Corona Rivera, al que le puso un buen rejón de castigo. Con los rehiletes al cambio estuvo espectacular y, sobre todo, la gente siempre apoyándolo. Toreó bien a la grupa, colocó otro palo al violín, otras más igualmente al cambio y adornando con vistosas balotadas. Por desgracia, volvió a fallar con el rejón final, descabelló y, a pesar de ello, el público lo obligó a dar la vuelta al ruedo tras un aviso.

A pie, el aquicalidense Joselito Adame, en su primero, llamado “Don Armando”, dedicado a la memoria de don Armando Corona Radillo, de buenas condiciones de principio, aunque no fácil después, veroniqueó templadamente y se lució en un quite por tafalleras y chicuelinas. Con la muleta, le fue encontrando la distancia, primero, llevándolo de las tablas a los medios con talento y, después, le fue cuajando poco a poco los pases hasta cristalizar dos tandas derechistas, además de otras por naturales, las mejores y derrochando maestría. Terminó con toreros adornos y manoletinas, acabando de estocada. El toro tardó en doblar y tuvo que descabellar para hacerse de una oreja.

En su segundo, “Amigo Chelis”, con calidad y clase, Joselito se recreó en lances a la verónica y lució en un vistoso quite por navarras. Buena vara del piquero Daniel Morales para ser ovacionado. Con la pañosa, tras brindarle al reconocido fotógrafo Óskar Ruizesparza, sacó a relucir su sapiencia torera pues empezó doblándose con oficio y en los medios cristalizar una faena que fue a más tanto en calidad como en emotividad, haciendo el toreo abandonándose por los dos perfiles y con gusto, a la vez de que el público se metió de lleno en la faena. Instrumentó toreros detalles, ayudados por alto y haciendo labor de aliño para matar de atinada estocada y entonces serle otorgadas las orejas y el rabo, dando vuelta al ruedo acompañado del ganadero Juan Pablo Corona y al astado dársele arrastre lento.

El también aquicalidense Héctor Gutiérrez, a su primero, “Don Juan”, bravo, capoteó con determinación, sin dejarse ganar “la pelea”, dando una larga cambiada de rodillas y oficiar con templanza a la verónica. Con la sarga, comenzó de hinojos en el tercio, además de dar muletazos largos y de mano baja yéndose a los medios para cuajar una faena corriendo la mano con la diestra y lograr naturales de buen trazo. El toro vino a menos y entonces el torero se pegó un arrimón, dejando los muslos como “carnada”, lo que emocionó a la gente. Concluyó de certero espadazo y se le concedió una oreja con fuerza.

En su segundo, “Ahijado Mateo”, de mucho peligro, Héctor salió a darlo todo. Lanceó con empeño y su labor muleteril fue a base de entrega y valor pues su antagonista no se la puso fácil. Aun así, el torero le tuvo paciencia, poco a poco lo metió en el engaño y aguantó de verdad las bruscas embestidas. Se puso en el sitio, en medio de la cuna de los pitones, para sacarle pases de gran relevancia hasta sufrir una voltereta, resultando con una herida en el gemelo de la pierna izquierda. Siguió en la cara del astado con evidente pundonor y emocionando al respetable para terminar de estocada de buena colocación, obteniendo las orejas.

Finalizado el festejo, tanto Joselito Adame como Héctor Gutiérrez fueron paseados en hombros de manera clamorosa.

 FICHA

LUGAR: Autlán de la Grana, Jalisco.

EVENTO: Cuarta y última corrida de toros, ésta mixta, de las tradicionales fiestas de carnaval.

PLAZA: “Alberto Balderas”. ENTRADA: Lleno en tarde agradable.

GANADO: Siete astados de la ganadería jalisciense de San Constantino, tres de ellos para rejones, uno de regalo, siendo buenos los dos primeros y también el de obsequio y, de los de la lidia pie, el tercero fue muy bueno, con arrastre lento: el primero no fue fácil, el segundo tuvo bravura, pero vino a menos y, el cuarto, tuvo peligro.

CARTEL: El rejoneador novillero Tarik Othón: Silencio, palmas tras un aviso y vuelta al ruedo tras un aviso en el de regalo. A pie, Joselito Adame: Una oreja y dos orejas y rabo. Héctor Gutiérrez: Una oreja y dos orejas. Al final, Joselito Adame y Héctor Gutiérrez fueron paseados en hombros.