Gran faena de indulto de Arturo Saldívar al toro de regalo “Temerario”, de Begoña

ADIEL ARMANDO BOLIO / Foto Paco Vargas

En noche fresca y con algo de viento, ante poco más de media entrada en el coso Monumental de la ciudad de Aguascalientes, se dio la octava corrida de la XCXV Feria Internacional de San Marcos, resultando triunfador, fuera de concurso, Arturo Saldívar, al indultar, tras una gran faena, al estupendo toro begoñés llamado “Temerario” para salir en hombros. En tanto, en el trascurso normal del festejo, el balear Antonio Ferrera se hizo de un apéndice y Gerardo Adame no tuvo suerte.

Se lidiaron siete toros de la dehesa guanajuatense de Begoña, uno de ellos de regalo, siendo muy bueno precisamente el de obsequio, al que se le perdonó la vida, de nombre “Temerario”, marcado con el número 31 y con 526 kilos. Bueno también fue el primero, de regular a malo el cuarto y, los demás, dejaron mucho que desear.

En el toro que abrió plaza, llamado “Carazo”, de buen juego, el balear Antonio Ferrera lanceó empeñoso con el capote. Buena vara del piquero Juan Cobos. Con la muleta, el ibérico empezó doblándose para seguir oficiando con la mano derecha, a pesar del viento y atemperando en cinco series magníficas. Por naturales, se dio gusto empleando el reposo y la calidad en su toreo. Una tanda derechista más de regular valor. Terminó de estocada caída para obtener una oreja.

En su segundo, noblote, pero de poca fuerza, Ferrera se dejó ver variado y torero con el capote. Buen puyazo del varilarguero Mauro Prado. Con la pañosa, Antonio, luego de brindarle a Verónica González López, titular del Buro de Congresos y Visitantes, le cuajó de inicio naturales con torería, pero, por el perfil diestro, de la misma forma se empleó. Siguió alternando los lados con calidad y buen toreo, yendo de menos a más. El toro empezó a sosear, pero, el torero se creció en más exposición derechista, a pesar de algunos inconformes trasnochados. Terminó de estocada casi entera y tendida para ser aplaudido en el tercio.

A su primero, el anfitrión Arturo Saldívar lo recibió en tablas, de rodillas, con una larga cambiada y, de pie, veroniqueó voluntarioso. Con la sarga, inició vaciando por alto, ligando un cambiado por la espalda y el de pecho. Continuó por el derecho y, ante lo tardo y soso del toro, en un palmo de terreno, le ligó pases escalofriantes. Al natural igualmente se metió entre los pitones, jugándosela de verdad y así engarzar temerarios pases por ambos lados. Lo hizo en redondo aguantando enormidades. Manoletinas para cerrar. Acabó de pinchazo y estocada caída para ser aplaudido en el tercio.

Saldívar a su segundo, que fue protestado, lo recibió de hinojos con una larga cambiada en tablas y, de pie, capotear empeñoso. Con la franela se dobló y por derechazos lo intentó, pero, su antagonista salía rehuyendo la reunión. Mató de estocada entera aguantando y dos golpes de descabello para tener silencio.

Arturo, al toro de regalo, “Temerario” de nombre, de la misma procedencia ganadera titular, le endilgó verónicas y tafalleras lucidas y, lo llevó al caballo por chicuelinas caminándole. Con la tela escarlata comenzó en los medios dando un pase por alto por la espalda y de pie adornarse con lucidos lances para entonces darse a cuajar una gran faena pletórica de arrebato, arte, estética, temple y calidad por ambos lados y en medio del contento general. Hizo el toreo en redondo de pie y de hinojos con plena entrega y firmeza en su propósito torero, además de ligar, en un palmo de terreno, hasta en dos ocasiones, la arrucina con toreo circular que puso al rojo vivo la plaza. Se perfiló para entrar a matar, la gente de manera insistente solicitó el indultó, el protagónico juez lo concedió, entonces Saldívar simuló la suerte de matar, llevó al toro hasta la puerta de toriles y ahí lo despidió a los corrales, en tanto que Arturo recibió el reconocimiento del público en una aclamada vuelta al ruedo y de igual manera en una vitoreada salida en hombros.

El también local, Gerardo Adame, a su primero, soso y rajado, lo bregó con oficio. Su labor muleteril, tras brindarle a su alternante Antonio Ferrera, ha sido a base de doblones y pases de tanteo, además de valientes derechazos a un ejemplar nada fácil, con aguante, aunque igualmente el toro le buscaba las espinillas. Por ese pitón siguió muy serio el torero, lo mismo que por naturales meritorios. De nuevo por derechazos evidenció esmero. Labor de aliño para terminar. Falló al matar para ser aplaudido tras dos avisos.

A su segundo, reservón y con peligro, Gerardo lo capoteó con esmero. Su quehacer de muleta, además de doblarse, lo sacó a los medios para aplicarle derechazos de mérito, lo mismo que por naturales. Lo intentó de verdad, hasta “robarle” una tanda de derechazos. Aliñó, fallo al matar y escuchó palmas.

FICHA

LUGAR: Aguascalientes, Aguascalientes.

EVENTO; Octava corrida de la CXCV Feria Internacional de San Marcos 2023.

PLAZA: Monumental. ENTRADA: Más de media en noche fresca y con algo de viento.

GANADO: Siete toros de Begoña, uno de ellos de regalo, siendo muy bueno precisamente el de obsequio, al que se le perdonó la vida, de nombre “Temerario”, marcado con el número 31 y con 526 kilos. Bueno también fue el primero, de regular a malo el cuarto y, los demás, dejaron mucho que desear.

CARTEL: El balear Antonio Ferrera: Una oreja y al tercio. Arturo Saldívar: Al tercio, silencio y aclamada vuelta al ruedo tras el indulto de “Temerario”, con salida en hombros al final. Gerardo Adame: Palmas tras dos avisos y palmas.