Columna ALTERNATIVA: Peligra la Biodiversidad

Peligra la biodiversidad

Gustavo Mares

 

La ligereza con la que las autoridades de la CDMX tocan el tema de la prohibición velada de la tauromaquia en esta urbe es aterrador. Lo que pasó con los grandes felinos de los circos es un ‘juego de niños’ con lo que pasará si se corta de un plumazo la tradición taurina que está por cumplir cinco siglos.

Con leyes ‘echas al vapor’, la prohibición de las corridas de toros en México tendría un terrible impacto. Ecológicamente pondrá en riesgo la biodiversidad del toro de lidia y alterará los ecosistemas de las dehesas

Económicamente, generará pérdidas significativas en empleos y turismo, especialmente a corto plazo.

El éxito de la prohibición dependería de políticas públicas que apoyen a los sectores afectados y de un enfoque claro para aprovechar las tierras liberadas de manera sostenible, lo que no va a suceder, pues el gobierno no puede atender problemas fundamentales como el desabasto de medicinas, la inseguridad y un Sistema de Transporte Colectivo Metro cerca del colapso.

El toro de lidia es una raza específica criada para las corridas.

Una prohibición reducirá la demanda de estos animales, lo que llevará a una disminución en su cría y, potencialmente, a la extinción de la raza. Esto afectaría la biodiversidad ganadera, ya que el toro de lidia es genéticamente distinto.

Les pasa de noche a muchos políticos de poca monta, que las ganaderías de toros de lidia ocupan grandes extensiones de tierra, muchas veces en ecosistemas semiáridos o de pastizal. Si las corridas desaparecen, estas tierras podrían destinarse a otros usos, como agricultura intensiva, lo que podría aumentar la deforestación o el uso de químicos… Incluso podrían destinarse sus terrenos a grandes unidades habitacionales.

Las dehesas suelen ser hábitats para especies silvestres, ya que no están tan intervenidas como otros sistemas agrícolas. Una reconversión de estas tierras podría afectar negativamente a la fauna local si se intensifica el uso del suelo.

Las corridas de toros generan empleos en ganaderías, plazas de toros, transporte, turismo, hostelería y artesanías (como la talabartería). Según estimaciones, en México la tauromaquia genera miles de empleos directos y decenas de miles indirectos, especialmente en estados como Aguascalientes, Tlaxcala, Hidalgo y Jalisco.

Una prohibición podría causar despidos masivos en estos sectores, afectando a comunidades locales que dependen de esta actividad, especialmente en áreas rurales en las que las ganaderías son un motor económico.

Las corridas atraen turismo nacional e internacional, especialmente en eventos como la Feria Nacional de San Marcos. La prohibición podría reducir el flujo de turistas en ciertas regiones, afectando a hoteles, restaurantes y comercios locales.

La tauromaquia es una tradición profundamente arraigada en ciertas regiones de México, y su prohibición podría generar resistencia social o polarización. Esto podría complicar la implementación de la prohibición y afectar el apoyo a otras políticas ambientales o económicas, que seguramente también se reflejará en las urnas.

Lo que más preocupa es que a las actuales autoridades les pasa de noche que la izquierda mexicana luchó por las libertades individuales. Hubo personas que dejaron la vida en eso y ahora nos las quieren quitar.

Para finalizar, la pregunta de la semana: ¿No sería más importante que Clara Brugada y secuaces enfocaran sus esfuerzos en evitar la falta de agua en diversos puntos de la CDMX?