Diego Sánchez lidió un “pavo” a puerta cerrada

Por: ADIEL ARMANDO BOLIO

Poco después de las 13:00 horas de este martes en el coso “San Marcos de la ciudad de Aguascalientes, bajo un sol que caía a plomo y quemaba de verdad, vestido a la usanza charra el joven y exitoso novillero local Diego Sánchez ante la atenta mirada de compañeros suyos de profesión, de matador de toros, amigos, familiares y la prensa especializada, a puerta cerrada lidió y mató un toro, un auténtico “pavo” procedente de la dehesa de Fernando de la Mora.

Ello fue a manera de preparación con miras al relevante compromiso que tiene el próximo domingo en el coso Monumental “Nuevo Progreso” de Guadalajara, Jalisco, dentro de la séptima y última novillada del serial mejor 2014, la de triunfadores, misma en la que, como se sabe, alternará con el anfitrión Carlos Casanueva y el tlaxcalteca Gerardo Rivera en la lidia de un encierro de la dehesa potosina de De Santiago.

Así que el “mulo” de Fernando de la Mora, marcado con el 54 y con 560 kilos si temor a equivocarnos, fue un regalo que le hizo el equipo de trabajo del rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza al propio chaval Diego Sánchez para que dispusiera de él cuando le viniera mejor en su alistamiento.

Y qué mejor que ahora cuando en puerta tiene tan importante compromiso en la llamada “Perla de Occidente” y donde estará en disputa la VI edición del trofeo “Manuel Capetillo”.

El “socio” se dejó torear con el capote aunque por momentos se escupía de la suerte y daba muestras de querer rajarse pero después de la estupenda y bien medida vara del maestro varilarguero Juan Cobos, el burel sangró lo debido, se asentó y se ha dejado torear a placer por Diego Sánchez por ambos pitones.

Hizo el toreo derechista con enorme dimensión y, sobre todo, con mucha expresión, toreando de aquí hasta allá. Lo mismo hizo por el pitón izquierdo, largando el brazo con temple y calidad. Fueron trazos de mucha clase y sentimiento, de solvencia y desahogo y principalmente, le dio la oportunidad de exponer su tauromaquia a un ejemplar de ese volumen. En fin, que el chaval se dio todo un festín de bien torear. Entrenó varias veces la suerte de matar no sin antes darle las famosas “tres” al también novillero regional Jorge Salvatierra, quien de igual manera le echó tipo y valor a las tandas que logró sacarle al burel de Fernando de la Mora.

Al final, Diego Sánchez se mostró agradecido con la gente de Pablo Hermoso de Mendoza por el obsequio y complacido a la vez por la manera en que pudo disfrutar de sus argumentos toreros y aunque todavía le falta tentar en la dehesa de De Santiago, dijo sentirse listo para el compromiso que tiene este domingo en Guadalajara, Jalisco.