Es Hermoso de Mendoza ‘profeta en su tierra’

FECHA: 3 de agosto de 2.014

LUGAR: Plaza de Toros de ESTELLA (NAVARRA).

ENTRADA: Casi lleno.

RESEÑA: Pablo Hermoso de Mendoza (oreja y dos orejas); Roberto Armendáriz (oreja y ovación); y Ginés Cartagena (oreja y oreja).

GANADERIA: Toros de José Rosa Rodríguez.

CABALLOS:

Primer toro de la Ganadería de José Rosa Rodríguez, número 137; De salida NAPOLEON (1 rejón de castigo); en banderillas DUENDE (2 banderillas) y BELUGA (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (dos cortas y un rejón de muerte tras pinchazo).

Segundo toro de la Ganadería de José Rosa Rodríguez, número 141; De salida ALEMAN (2 rejones de castigo); en banderillas DISPARATE (2 banderillas) y HABANERO (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (dos cortas, un par de cortas a dos manos y un rejón de muerte).

CABALLOS DESPLAZADOS: BACO y CHURUMAY.

COMENTARIO. Pablo Hermoso de Mendoza cumplía el compromiso en la plaza de su localidad y como no podía ser de otra forma, comenzó su comparecencia con homenaje de sus paisanos. El Club Taurino Estellés y El Ayuntamiento de Estella le entregaron sendos obsequios conmemorativos de sus 25 años como matador de alternativa y la Banda Municipal de Estella le felicitó con música. Todo esto ocurrió en los prolegómenos de un festejo que comenzó con un astado un tanto deslucido del que  Hermoso estuvo muy por encima destacando principalmente el tercio de salida con un soberbio NAPOLEON que paró al toro con una cadencia y con una despaciosidad imposibles de superar. Antes y después del rejón de castigo el caballo se dejó llegar al toro metiéndolo literalmente en la cola y dándole “trincherazos” con la cola quedándose el caballo parado mientras el toro se rebosaba por su grupa. Magistral tercio. Comenzó con DUENDE, pero tuvo enfrente a un toro parado y poso colaborador que cuando seguía a la grupa del caballo lo hacía con poca transmisión a pesar que el caballo se ponía cerca y lo provocaba a embestir. No sería hasta la segunda parte del tercio, con BALUGA cuando la faena retomó vuelo porque el caballo hace un toreo más cercano y más en redondo y ahí obligaba al toro a embestir sí o sí. De esta forma BELUGA disfrutó de una actuación más redonda y  más lucida y pudo transmitir a los tendidos toda la emoción que al toro le faltaba, haciéndose un arco en cada pasada por la cara del astado. No se alargó mucho en banderillas cortas y fueron dos montando a PIRATA antes de los desplantes del teléfono y los rejones de muerte, con los que culminó una oreja que para los paisanos y para la presidencia mereció la primera oreja de la tarde.

Y si el primero resultó insulso, el cuarto fue un manso peligroso y complicado que no quería embestir, pero cuando lo hacía eran arreones de manso con un enorme peligro sordo. Como pasó hace algunas fechas en Arévalo, ALEMAN tuvo la mala suerte de nuevo de cara y su segundo toro también hizo que el caballo pasara casi inédito. Bueno inédito en verle las facultades que se le adivinan, pero muy eficaz ante semejante enemigo, que apenas le brindó una embestida y ante el que el caballo tuvo que estar mucho más bravo que el marrajo. Dos rejones, en dos relances y apenas una carrera detrás del caballo. El eficaz capote de Rodríguez y el poderío de la grupa de DISPARATE arrancaron algunas carreras o más bien arreones del manso que incluso el caballo templó y toreó de forma «hermosina” aunque eran carreras a una velocidad superior a la necesaria y además sin fijeza. Era un toro que no embestía, sino que arrollaba. El lucimiento de DISPARATE se convirtió esta tarde en eficacia y técnica lidiadora para vencer las dificultades de un astado totalmente a contraestilo y el caballo dio una nueva medida de la capacidad que tiene. Otro que se echó la tarea a los lomos fue HABANERO que enfrentó al toro sin importarle si venía o tenía que ir él. Le llegó en dos ocasiones a los medios, saliendo cuarteando muy bien de la suerte y comenzó esas ruedas de piruetas que terminaron por mostrar como ante un toro manso y complicado también se pueden hacer cosas. HABANERO rayó a un alto nivel, con un Pablo totalmente arrancado y enrabietado por la condición de un astado, al que con PIRATA volvió a someter en banderillas cortas, lo volvió a implicar en sus terrenos y a taparle las querencias y cerró el tercio bandilleril con un gran par a dos manos colocado en el mismo centro del ruedo. Luego vinieron desplantes, cruces por la querencia y el rejón de muerte, donde Pablo se dejó ver con PIRATA hasta que aprovechando la querencia el toro se arrancó y el jinete pudo enterrar un rejón casi entero que terminó por hacer efecto para que el toro doblase. Premio de dos orejas a una faena muy compleja y donde se pudo ver al Pablo más lidiador y técnico ante un enemigo que pedía el carnet de matador.

Al final una nueva puerta grande para Hermoso de Mendoza en “su” plaza y que hace la veinticuatro en veintinueve actuaciones y que en esta ocasión compartió con el joven Ginés Cartagena.