*Foto Tauro Nota
El novillero Manuel Gutiérrez lidió y mató a puerta cerrada, en un cortijo de su natal Aguascalientes, un burel de la ganadería zacatecana de José Julián Llaguno que pesó más de 410 kilogramos.
El decidido hidrocálido se prepara con ahínco para inaugurar la temporada novilleril que se pondrá en marcha el próximo domingo en el Cortijo Los Ibelles en Atizapán, Estado de México.
Asegura Gutiérrez que se sintió muy bien delante del de ‘negro’.
El joven torero llegará muy bien preparado al compromiso en el que alternará con Maxime Solera, José Miguel Arellano y Enrique de Ayala para lidiar ejemplares de Manuel Labastida.
‘Llegaré muy bien preparado. El toro fue bueno y me sirvió bastante, sobretodo moralmente porque pude cuajarle tandas buenas por el pitón derecho’, asegura.
La de la próxima semana será su primera novillada del año y es que debido a una lesión no pudo cumplir con el compromiso que tenía firmado en San José de Gracia. Su más reciente actuación tuvo verificativo el pasado 30 de diciembre en Encarnación de Díaz, Jalisco, donde salió a hombros.
Gutiérrez tiene la onza y lo demostrará en Los Ibelles.