Fotos: Juancho Cervantes
TLAHUALILPAN, Hidalgo.- Cuando los toros conjugan bravura y trapío todo lo que acontece en el ruedo cobra especial relevancia, como ocurrió en esta plaza hidalguense donde se lidió un serio y buen encierro de Torreón de Cañas.
El coso registró media entrada en el marco de la ‘nueva normalidad’. Los astados, de impecable lámina, fueron ovacionados en su salida al ruedo. Pelearon fuerte en el tercio de varas. En cuanto a juego, fueron buenos en términos generales. Destacaron los jugados en primero y tercero lugares, cuyos restos merecieron los honores del arrastre lento.
Los corridos en quinto y séptimo lugares recibieron una ovación póstuma en su camino al destazadero.
El hidalguense Pablo Samperio, ovación, silencio en el que mató por Fuentes y oreja.
El capitalino Manuel González ‘Montoyita’ firmó una tarde triunfal en la que al primero de su lote le cortó las dos orejas; a su segundo le tumbó un apéndice y recibió un trofeo más del que lidió por el diestro lesionado.
Emiliano Villafuerte ‘El Moso’, oreja y oreja.
Carlos Fuentes fue prendido por su primero. Es probable que sufra fractura de clavícula.
Al término del festejo, ‘Montoyita’, ‘El Moso’ y el criador Jorge Uribe salieron a hombros.
