Hilda Tenorio celebra trece años de alternativa

A trece años de alternativa, la michoacana Hilda Tenorio ha pasado varios años inactiva debido a los largos tiempos de rehabilitación que ha tenido que afrontar durante su paso por los ruedos.
Una terrible cornada en el rostro, así como otros tantos percances, han tenido postrada a la torera, abogada de carrera, en una cama de hospital. Pese a todos los sinsabores que ha tenido que afrontar asegura la cumpleañera que ‘no me cambio por nadie. Torear es lo que más me gusta hacer en la vida’, comenta la michoacana, que tiene más de un mes en España donde se prepara con ahínco toda vez que atesora la ilusión de reaparecer vestida de luces ‘del otro lado del Atlántico. Es algo que me hace mucha ilusión y por lo mismo es que estoy en Madrid. Ahora mismo hace mucho frío, pero en cuanto baje podré hacer campo’, comenta la purépecha.
Mujer de retos, en su faceta de abogada la michoacana tuvo oportunidad de trabajar en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. ‘Es un trabajo muy bonito y que implica mucha responsabilidad, pero lo mio es torear. Es lo que me hace sentir viva. Creo que ser torero es algo vocacional’, señala Hilda, quien ha tenido ofrecimientos para torear en países como Colombia o Venezuela.
‘Me ilusiona la idea de reaparecer luego de un par de años en rehabilitación aquí en territorio español. Son muchos los factores que conlleva esa idea. Después de torear aquí, por supuesto que me encantaría hacer el paseíllo en Venezula, Colombia, Perú y Ecuador. Pero primero está España’, asevera la moreliana, que en nuestro país también tiene previsto llevar a cabo una campaña.
Confiesa que ocasionalmente ha llegado a pensar en convertirse en mamá, ‘pero no es algo que tenga como uno de los objetivos primordiales en mi vida. Me encantan los niños, pero un rato. Sí he llegado a sentir el anhelo de ser mamá, pero es momentáneo’, dice la torera, que entrena fuerte desde que sale el sol hasta que se mete.
El gran oficio que atesora Hilda Tenorio le llevó a tomar la alternativa en la Plaza de Toros México el 28 de febrero de 2010. Recibió el abrazo de manos del maestro Manolo Mejia con el testimonio del diestro español Ruiz Manuel, con ejemplares muy serios de la dehesa de Autrique. Aquel dia, Hilda Eliana Tenorio Patiño no sólo se convirtió en la primera mujer en doctorarse en el coso más grande del mundo, sino también en la primera matadora de toros en cortar trofeo en el coso de Insurgentes.
Trece años han pasado desde aquel histórico abrazo y la decidida torera mantiene la misma ilusión, que el primer día que vistió de luces.